TW
0

El Ministerio fiscal, así como la acusación que representa a los padres y la viuda del torero Víctor Barrio, junto con la Fundación Toro de Lidia, han mantenido sus peticiones de condena para el profesor Vicente Belenguer, a quien consideran autor de un delito de odio por un mensaje publicado en Facebook, tras la muerte del torero, en el que profería insultos contra el diestro y su familia y mostraba su alegría por lo ocurrido.

La pena reclamada por la Fiscalía es de cuatro años de prisión, más otros ocho de inhabilitación en labores de enseñanza y el pago de una indemnización global de 40.000 euros, más una multa de otros 3.650 euros, mientras que la acusación particular mantiene su petición de cinco años de prisión, inhabilitación por un periodo de diez años y la misma cuantía económica que la acusación pública.

El juicio se ha celebrado durante la mañana de este jueves en el Juzgado de lo Penal de Segovia, donde el acusado se ha declarado inocente y ha alegado que no fue él quien escribió el comentario ni otros contra la tauromaquia publicados dos años antes.

Según Belenguer, alguien había «hackeado» o «pirateado» su cuenta en Facebook, sin tener conocimiento de dicha circunstancia hasta la publicación del comentario concreto sobre Víctor Barrio y que se viralizó por redes sociales.

Por su parte, la defensa del acusado entiende que no existe «prueba de cargo» que demuestre la autoría de los comentarios de Vicente Belenguer, a la vez que ha insistido en que lo único aportado es «un pantallazo» del mensaje, cuya validez ha cuestionado.

La abogada del imputado también ha hecho hincapié en que su defendido se puso a disposición de la Policía Nacional desde que conoció la publicación y que ésta no requirió la dirección IP del mismo con la que localizar el dispositivo desde el que se había escrito el mensaje en cuestión.

En el caso de otra de las partes implicadas en el juicio, Facebook, su representante ha insistido en que la entidad citada al juicio, 'Facebook Spain'm no es la «correcta», ya que no es la propietaria del medio donde se han producido los hechos, y ha explicado al juez que la entidad correcta en este caso es 'Facebook Ireland Ltd', ya que su filial española solo da soporte en la actividad comercial y de márketing, pero no alberga registros de datos.
En su alegato final, el imputado se ha vuelto a manifestar inocente, mientras que la viuda del torero, Raquel Sanz, a la salida del juicio, ha animado a las víctimas de comentarios de este tipo en redes sociales a que denuncien, ya que, según ha aseverado, «es la única forma de acabar con estos delitos».