Imagen de Pablo Iglesias e Irene Montero.

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Podemos ha solicitado al juez que investiga el caso Neurona que «rechace de plano» las nuevas acusaciones realizadas por la ex responsable de Cumplimiento Normativo del partido Mónica Carmona, que ha acusado al vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, y a la ministra de Igualdad, Irene Montero, de usar a una empleada 'morada' como niñera, alegando que tiene una «enemistad manifiesta» con la formación política.

El partido se ha quejado del escrito que Carmona ha enviado al juez Juan José Escalonilla para responder al requerimiento de información que le hizo el propio instructor tras su declaración como testigo el pasado mes de octubre, y que aprovechó también para poner en su conocimiento «algunos hechos investigados internamente» que no fueron incluidos en la denuncia presentada en 2019 por el también ex abogado de Podemos José Manuel Calvente.

Podemos ha solicitado a Escalonilla que, dado que el escrito de Carmona «debería tener por único objeto acompañar los documentos que el instructor requirió», «rechace de plano la unión del mismo a las actuaciones, al contener cuestiones ajenas a ese requerimiento, y que únicamente adicione los archivos informáticos que se acompañen al mismo, y siempre que formen parte del requerimiento expresamente realizado».

En su escrito, al que ha tenido acceso Europa Press, la organización 'morada' ha achacado las acusaciones de Carmona a que «tiene enemistad manifiesta respecto de su empleador y determinadas personas del mismo», recordando a este respecto que demandó a Podemos por su cese, un caso que se tramita en el Juzgado de lo Social Número 1 de Granollers y que está pendiente de sentencia.

«CUESTIONES DE ÍNDOLE PERSONAL»

Se ha quejado particularmente de que Carmona alude a «cuestiones de índole personal que nada tienen que ver con el presente procedimiento», entre ellas que Montero habría usado a Teresa Arévalo, trabajadora del partido y asesora de Igualdad, como niñera para su hija y que Iglesias habría cobrado al menos 7.730 euros en costas procesales de casos que pagó la organización política.

Ha afeado también a Carmona que incluya en su escrito el mensaje de Telegram que envió a Iglesias el 4 de diciembre de 2019 para alertarle de que su despido y el de Calvente eran una «represalia» por «haber detectado una serie de irregularidades graves que podrían comprometer seriamente al partido como entidad jurídica desde un punto de vista penal, administrativo y reputacional». Según ella, el líder de Podemos lo leyó pero nunca contestó.

En este sentido, Podemos ha recordado que Escalonilla pidió a Carmona que diera al juzgado los expedientes que obraran en su poder sobre las investigaciones que ella y Calvente realizaron sobre las supuestas «irregularidades» que se analizan en esta causa y que el juez rechazó expresamente que incluyera el mensaje de Telegram a Iglesias --sobre el que ella ya había declarado en sede judicial-- «al ser ajeno al presente procedimiento».
Así, la formación política ha querido señalar el «escandaloso desprecio» de Carmona a lo acordado por el instructor sobre el mensaje enviado a Iglesias, ya que la ex abogada lo transcribe «íntegramente», a pesar de que el día que declaró Escalonilla ya la advirtió de que «no iba a tener en cuenta cuestiones ajenas al procedimiento».

UNA «AMPLIACIÓN» DE LA DENUNCIA

Asimismo, Podemos ha criticado que Carmona hace «argumentaciones variopintas de índole supuestamente fáctica y jurídica sobre los hechos que están siendo objeto de investigación o que lo estuvieron, habiéndose en estos momentos sobreseído provisionalmente la causa con respectos a la mayoría», como la supuesta 'Caja B', los contratos electorales con la consultora política ABD, las obras de la nueva sede o el acceso no consentido a un disco duro de la abogada 'morada' Marta Flor.

Escalonilla ya había archivado las otras líneas investigación para centrarse en el contrato firmado por Podemos con la consultora política Neurona para las elecciones generales del 28 de abril de 2019, que el juez sospecha que fue un contrato simulado para desviar dinero del partido. Sin embargo, ahora las acusaciones populares sopesan pedir al instructor que indage también en los nuevos hechos mencioados por Carmona, como la niñera o las costas procesales.

Con todo ello, Podemos ha reclamado en su escrito que solamente se incorporen a la causa «los expedientes documentales y no únicamente por mera referencia o transcritos ahora» en lo que considera una «ampliación» de la denuncia presentada por Calvente contra Podemos o «una suerte de escrito de alegaciones más propia de una de las partes personadas y vedado a una testigo».