Para este miércoles, el precio de la luz marcará un máximo de 129,81 euros/MWh -de las 22.00 a las 23.00 horas- y un mínimo de 119,95 euros/MWh -de las 04.00 a las 05.00 horas-, según datos de OMIE. Este martes, el 'pool' eléctrico ya había puesto fin a la tregua dada en el fin de semana, cuando cae la demanda, y recuperaba niveles por encima de los 100 euros/MWh.
Ya este miércoles tocó el que era, hasta el récord de mañana, el segundo máximo registro en la serie histórica del mercado eléctrico, con un precio medio para el día de 116,73 euros/MWh, que se verá este jueves incrementado en algo más de un 5%. Con respecto a hace un año, el precio medio diario de la electricidad para este jueves será un 165% más caro que los niveles que marcaba por las mismas fechas de agosto de 2020, cuando fue de 46,25 euros/MWh.
En lo que va de agosto, el 'pool' ha pulverizado todos los récords vistos hasta ahora, apuntando a un precio medio para el mes por encima de los 100 euros/MWh. Del 9 al 13 de agosto ya marcó una cifra máxima tras otra. Así, mañana unirá un nuevo máximo histórico en lo que va de mes.
Esa espiral alcista ha llevado a focalizar el debate político en cómo abaratar el precio de la electricidad. De hecho, el Gobierno abrió la puerta a crear una empresa pública energética, tal y como viene desde hace tiempo pidiendo su socio en el Ejecutivo, Unidas Podemos. De hecho, la formación morada ha realizado una última propuesta al Gobierno para abaratar la factura de la luz que pasa por limitar el precio de la energía nuclear e hidroeléctrica mediante decreto ley.
Este contexto de subidas en el 'pool' eléctrico está marcado por el incremento en los precios de los derechos de CO2 y del gas, a los que se ha unido el incremento de la demanda por la ola de calor.
En concreto, los derechos de emisión de CO2 se han encarecido hasta superar en lo que va de agosto los 55 euros por tonelada, cuando a principios de año cotizaban en torno a los 33 euros. Mientras, el precio del gas natural se sitúa en torno a los 44,7 euros por MWh, según datos de Mibgas.
El precio de la energía tiene un peso cercano en la factura de en torno al 24%, mientras que alrededor del 50-55% corresponde a los peajes -el coste de las redes de transporte y distribución- y cargos -los costes asociados al fomento de las renovables, a las extrapeninsulares y las anualidades del déficit de tarifa- y el resto, a impuestos.
Las oscilaciones en el precio diario afectan a los consumidores acogidos a la tarifa regulada (PVPC), algo más de 10 millones, mientras que están exentos los que están en el mercado libre -unos 17 millones-, ya que cuentan con un precio pactado con su compañía.
Según indicaron a Europa Press expertos del sector, el 88% del consumo eléctrico de España no está expuesto a la volatilidad del precio del mercado 'spot', al tener contratos con precios fijos, viéndose así expuestos a ella los clientes acogidos al PVPC.
El pasado 24 de junio el Gobierno aprobó un Real Decreto-Ley por urgencia para reducir los impuestos que se aplican al suministro de energía eléctrica y, con ello, la factura de la luz de los hogares, los autónomos, las pymes y el conjunto de las empresas, que suponen la bajada del IVA de la luz del 21% al 10% hasta finales de este año y la suspensión del impuesto del 7% a la generación eléctrica durante tres meses.
En el caso concreto del IVA, se aplica una bajada al 10% hasta fin de año para todos los consumidores con potencia contratada hasta 10 kilovatios (kW), siempre que el precio medio mensual del mercado mayorista de la electricidad esté por encima de los 45 euros por MWh.
En lo que se refiere a la suspensión del 7% del impuesto sobre el valor de producción de energía eléctrica, que ya en 2018 se decidió su suspensión temporal durante seis meses para contener otra ola alcista en el precio de la luz, estará vigente durante el tercer trimestre de este año.
De hecho, la factura de la luz de un usuario medio en agosto será «la más cara de la historia», con un encarecimiento en la primera quincena del 43,7% con respecto al mismo periodo del año pasado, según datos de Facua-Consumidores en Acción.
Hasta la fecha, los cinco recibos más elevados han sido los 88,66 euros del primer trimestre de 2012 (con el IVA al 18%), los 87,81 euros de enero de 2017, los 85,34 de julio de 2021, los 83,55 euros de septiembre de 2018 y los 82,13 euros de mayo de 2021 -en todos los casos con el IVA al 21%-, según datos de la asociación.
Con las tarifas aplicadas del 1 al 15 de agosto, el usuario medio pagará 27,85 euros más que en agosto de 2020, cuando la factura se situó en 63,77 euros. La bajada del IVA al 10% hasta diciembre mientras el precio medio del megavatio hora esté por encima de los 45 euros amortigua la subida en 9,16 euros. Si se siguiera aplicando el 21%, el recibo habría alcanzado los 100,78 euros.
1 comentario
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
Por suerte, estas noticias alarmistas no se compaginan con mi última factura de la luz, sin subidas relevantes.