El ministro de Justicia. | Europa Press

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El ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, ha rechazado que el Gobierno haya cruzado una línea roja respecto a la consideración del delito de terrorismo en la Ley de Amnistía al pactar una enmienda con Junts que solo excluye este tipo penal de la ley cuando se produzcan violaciones graves de derechos humanos.

Por el contrario sostiene que este cambio en la norma aporta más seguridad jurídica. Asimismo, fuentes gubernamentales precisan que el cambio deja en manos de los jueces la decisión de si los delitos que se juzgan alcanzan ese nivel de gravedad que los excluye de la Amnistía.

En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que se ha celebrado este martes en La Moncloa, Bolaños ha sido cuestionado por este último cambio pactado con Junts, cuando desde el Gobierno venían sosteniendo que dejar fuera de la amnistía los delitos de terrorismo era una línea roja que no iban a pasar.

En todo caso el ministro ha defendido que este límite no se ha traspasado porque a su juicio el terrorismo sigue exceptuado «cuando haya una violación grave de derechos humanos». «Esa era nuestra línea roja y así se ha pactado hoy en la Comisión de Justicia» del Congreso de los Diputados, ha defendido.

Afirma además que lo que se ha hecho es mejorar el artículo, «garantizar su seguridad jurídica» y adaptarlo «a los mejores estándares europeos», es decir la directiva europea y el Convenio Europeo de Derechos Humanos, según trasladan.

Con la nueva redacción de la ley, desaparece la excepción de los delitos de terrorismo «cuando haya sentencia firme» y en este sentido fuentes gubernamentales explican que se ha retirado esa parte porque generaba inseguridad y podía provocar que se amnistiaran todos los casos de terrorismo investigados. Señalan así que ninguna de las causas en curso, en los casos de los CDR y Tsunami Democràtic tiene sentencia firme. En ese sentido añaden que al hablar de delitos «con sentencia firme» se dejaba una puerta abierta «más grande que la de Brandemburgo» por la que se podían colar en la Amnistía muchos delitos de terrorismo.