Cort no informa de la ubicación del edificio por la seguridad de las víctimas de violencia machista, como las mujeres de la fotografía. | Joan Torres

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El equipo de Gobierno del Ajuntament de Palma prepara la reforma de un edificio municipal para trasladar el Servei d'Acolliment Municipal (SAM) para víctimas de violencia de género. El proyecto tiene un presupuesto de 706.056,19 euros, de los que cerca de 400.000 euros provendrán de la Ley de Capitalidad.

El concejal de Igualtat, Joventut i Drets Cívics, Aligi Molina, explica que no se puede dar a conocer la ubicación de este inmueble que va a acoger el SAM para víctimas de violencia de género por la seguridad de las personas que vivirán temporalmente en él. «La estrategia que sigue este servicio, desde su creación, es la de no hacer pública la dirección del centro como forma de aumentar la seguridad de las mujeres víctimas que son acogidas».

Este servicio, recuerda Molina, se ubicaba en 2015 en un edificio público pero que no era de titularidad municipal y que no reunía las condiciones mínimas necesarias «y por eso se tuvo de trasladar». Actualmente se encuentra asentado en un edificio de titularidad privada por el que el Ajuntament de Palma debe pagar un alquiler mensual.

En opinión del responsable municipal de Podem Palma, «el hecho de que el nuevo equipamiento vaya a ser municipal ha de garantizar la máxima calidad del servicio y las condiciones del mismo». Cuando se consolide en el nuevo equipamiento, añade, «tendrá mucha más estabilidad, que es lo que necesita un servicio de esta naturaleza para poder centrarse en el trabajo con las mujeres y sus hijos».

El proyecto de reforma del edificio ya está en marcha, ya se ha publicado en el BOIB y en breve se espera licitar las obras de reforma del inmueble para adaptarlo al servicio que prestará.

La idea, detalla el concejal, «es trasladar el SAM para víctimas de violencia de género y, además, generar un sistema de acogida que tenga en cuenta diversos perfiles». Eso quiere decir, explica Molina, que además de este centro, se complementará el servicio con más pisos de los que hay ahora repartidos por la ciudad. «Para ello hay prevista una partida de 350.000 euros que tenemos para la compra de nuevos inmuebles». Cada piso tendrá un perfil con necesidades distintas y, según criterios técnicos, las usuarias podrán estar en un lugar u otro, destaca Molina.