Imagen general de la plaza del Progrés, en el barrio de Santa Catalina. | M. À. Cañellas

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El plan de protección de Santa Catalina, que está ultimando el Ajuntament de Palma, permite la construcción de un aparcamiento soterrado en la plaza del Progrés.

El teniente de alcalde de Urbanisme, José Hila, precisa que estaría ubicado junto a la gasolinera, que no está previsto que sea eliminada. No obstante, no puede concretar el número de plazas que tendrá el párking, ya que eso se detallará en el proyecto, cuando sea redactado. Hila destaca que la construcción de un aparcamiento en la plaza del Progrés es una demanda vecinal, debido a los problemas para dejar los vehículos.

Aprobación

Respecto a la aprobación inicial del plan de protección de Santa Catalina, el concejal pretende que sea como tarde el próximo mes de marzo.

El objetivo de este plan es «mejorar la normativa y la regulación en la zona y detallar parcela por parcela, buscando una mejor integración de las edificaciones con el entorno». Por este motivo, se han incorporado criterios de composición y estética, y no solo se protegen edificios concretos como valor patrimonial, si no que también se incluye la protección de los elementos o conjuntos que ayudan a definir los valores de paisaje y ambiente urbano característicos del barrio.

Respecto a los aspectos tipológicos, se suprime la obligatoriedad de las esquinas de los edificios sean en chaflán y será obligatorio que sean redondas, siguiendo la tipología de la barriada. ARCA ha sido muy crítica porque al obligar a que las esquinas fuesen en chaflán se perdía un elemento característico de Santa Catalina.

Además, los materiales de los acabados tendrán que ser los tradicionales (pinturas minerales, etc.) y en materia de composición se deberán mantener criterios tradicionales propios del barrio para la composición de fachadas, ventanas y aperturas.

«Tenemos la clara voluntad de preservar el carácter y las características arquitectónicas y tipológicas del barrio, de mejorar tanto el espacio público como los equipamientos y, al mismo tiempo, asegurar una adecuada convivencia de los diferentes usos», destaca Hila. Además asegura que estos objetivos son compartidos por los vecinos y los diferentes sectores económicos.