La reivindicación de los vecinos de La Llotja del derecho al descanso se remonta a hace muchos años. | ARCHIVO

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Las asociaciones de vecinos del Districte Centre de Palma dieron este miércoles su apoyo público a los residentes de La Llotja y el Puig de Sant Pere en su defensa del cierre de las terrazas de los bares y restaurantes de la zona a partir de las 23.00 horas, como ha impuesto el Ajuntament.

Hasta siete asociaciones vecinales (de Banc de s'Oli, La Calatrava, Monti-Sion y Santa Clara, Canamunt-Ciutat Antiga, Llotja y Puig de Sant Pere, Sant Jaume y Sant Nicolau), además de Palma XXI y el colectivo Ciutat per a qui l'habita han firmado un escrito en el que apoyan a los vecinos de La Llotja y el Puig de Sant Pere en sus reivindicaciones para volver a hacer de su barrio «un espacio de convivencia para los residentes, donde prevalezca el derecho a la ciudad (que incluye el derecho al descanso, la intimidad familiar, la salud, el medio ambiente adecuado y la inviolabilidad del domicilio ) sobre el derecho de empresa, basado en criterios económicos».

Las asociaciones de vecinos de La Llotja y el Puig de Sant Pere habían firmado un escrito en defensa del cierre de las terrazas de esta zona a partir de las 23.00 horas, «como ya se hace en otros barrios del centro de Palma», según se informó este miércoles desde Palma XXI.

«El crecimiento económico de unos pocos no puede pasar nunca por encima de los intereses y el bienestar de la mayoría, para transformar Palma en una ciudad sostenible, inclusiva y donde prevalezcan los derechos de quienes la habitamos», defienden las entidades vecinales.

El comunicado suscrito por las entidades vecinales añade que «las políticas públicas deben defender este derecho a la ciudad por encima de los intereses económicos: si no es así, los residentes acabarán por ser expulsados de sus barrios».

Concluye que «los vecinos y vecinas somos necesarios para asegurar la existencia de una ciudad viva», por lo que esperan que «el Consistorio recién constituido cumpla con los compromisos adquiridos en La Llotja y otros barrios, necesarios para hacer de la ciudad un lugar para vivir y visitar».

De este modo, las entidades vecinales reaccionaron, a la vez que mostraron su sorpresa, ante la decisión de asociaciones empresariales de recurrir la medida adoptada por Cort de adelantar el horario de cierre de las terrazas, en aplicación de la declaración como Zona de Especial Protección (ZEP) de parte del barrio.

Desde hace un par de meses, los empresarios de La Llotja deben retirar las terrazas de sus locales a las 23.00 horas, cuando hasta ese momento el horario era de 07.00 a 00.00 horas de lunes a a jueves y hasta las 00.30 horas los fines de semana y vísperas de festivo. De hecho, la Asociación Mallorquina de Cafeterías, Bares y Restaurantes está a la espera de saber si el Juzgado de lo Contencioso Administrativo acepta la solicitud de medida cautelar de suspensión del Decreto 6438 del Consistorio por el que se adelanta el cierre de estas terrazas hasta que se resuelva el recurso que ha presentado.

Una sentencia

Este adelanto del horario de las terrazas no se incluyó en la nueva Ordenanza municipal de ocupación de la vía pública que aprobó el equipo de Gobierno de la pasada legislatura.No obstante, ya se había anunciado la intención de aprobar el adelanto por la vía decreto para dar cumplimiento a una sentencia del TSJB de 2014, que da la razón a los vecinos de La Llotja sobre los problemas de ruido que padecen.