Un operario limpia las cámaras de videovigilancia de la Platja de Palma en 2015, cuando aún funcionaban. | Alejandro Sepúlveda

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Las cámaras de videovigilancia de la Playa de Palma volverán a funcionar «de forma inminente», según anunció la regidora de Seguretat Ciutadana, Joana Maria Adrover, en la reunión que la Comissió de Seguiment de la Platja de Palma celebró este lunes.

Este sistema de videovigilanca se instaló en 2008 y tuvo un coste de unos 50.000 euros. Fuentes de Cort explicaron que las cámaras dejaron de funcionar hace aproximadamente tres años y que la Policía Nacional había reclamado que se repusieran en atención a su utilidad para identificar a posibles delincuentes, además de la función disuasoria que cumplen. El Ajuntament informa que ahora se instalarán cinco. Tendrán un coste de 30.000 euros y se recurrirá a un remanente del presupuesto de 2018. Está previsto que la junta de gobierno licite la actuación dentro de las próximas semanas.

Desde que comenzó la legislatura, este lunes se reunió por primera vez la Comissió de Seguiment de la Platja de Palma, que incluye a entidades vecinales, hoteleras y empresariales, además del Consistorio.

Una de estas entidades es Ciutat de s'Arenal. Su presidente, Biel Barceló, explicó que en esta primera reunión se había reiterado la petición que varias asociaciones habían hecho a Cort para que se creara una unidad específica de la Policía Local, «imprescindible para corregir los problemas de convivencia», para que creara brigadas de agentes cívicos y para que la Platja de Palma se convierta en un distrito «por si misma» (actualmente comparte distrito con Sant Jordi).

Barceló recordó que estas propuestas ya se hicieron la legislatura anterior pero que no han obtenido aun respuesta. «Siempre estamos igual, las cosas nunca acaban de arrancar. Cuesta mucho conseguir algo», lamentó.

Nuevas zonas de interés turístico

La agrupación ciudadana Ciutat de s'Arenal reiteró su demanda para que declare dos nuevas zonas especiales de interés turístico (ZEIT) en dos puntos de la barriada donde a menudo se registran problemas de convivencia entre turistas y vecinos. También pidieron seguir el proyecto para hacer corredores verdes entre el Pla de Sant Jordi y la Platja de Palma y que Cort se implique en su campaña ‘Despega la pegatina'.