Imagen de archivo del cementerio de Palma. | Pere Bota

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El Obispado de Mallorca ha suspendido todas las misas de los días 1 y 2 de noviembre, del día de Todos los Santos y de los Fieles Difuntos, en el cementerio de Son Valentí de Palma para evitar aglomeraciones durante estas dos jornadas y evitar la propagación de la covid-19.

De este modo, el obispado acata las instrucciones del Ayuntamiento de Palma y de la Empresa Funeraria Municipal (EFM) porque «no es el momento de arriesgar la vida de las personas», ha recalcado el director de Exequias y Atención a los Cementerios y Sanatorios de Palma, Joan Femenia.

Femenia ha invitado a los creyentes a participar en las misas que se celebrarán en las parroquias de la isla por Todos los Santos y el Día de los Fieles Difuntos.
En todos los templos se respetarán las medidas de seguridad acordadas por las autoridades sanitarias, como la continua higiene de manos y la desinfección del recinto.
«Nos unimos desde el dolor que supone eliminar estas celebraciones de la Eucaristía con la esperanza de que volveremos revitalizados», ha declarado este sacerdote.

El consistorio ha pedido a los palmesanos que eviten visitar a sus difuntos en Son Valentí los días 30 y 31 de octubre y el 1 de noviembre para evitar la concentración de grandes multitudes.

El cementerio estará abierto al público todos los días, pero para visitar el camposanto expresamente alguno de esos tres días se debe pedir cita previa.