La gasolinera de la plaza de Progrés tiene filtraciones en el depósito. | Gemma Marchena | PALMA

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El Ajuntament de Palma reiteró su intención de recuperar el dominio público de las gasolineras de les Avingudes y de la Plaça de Progrés y recordó que si la propiedad no cesa la actividad y presenta los proyectos para desmantelar los surtidores y descontaminar los espacios empezará a imponerles «multas coercitivas». Así lo confirmó la regidora de Participació Ciutadana, Claudia Costa, tras la reunión de Junta de Govern al mismo tiempo que recordaba que tiene previsto una reunión con la empresa en la que, espera, «se comprometan a paralizar la actividad y devolver los espacios como estaban antes de instalar las gasolineras».

Cabe recordar que el Tribunal de lo Contencioso Administrativo denegó las medidas cautelares solicitadas con las que los propietarios pretendían paralizar el proceso. Una vez notificada la resolución el Consistorio retomó el expediente para desmantelar las gasolineras toda vez que, recodó Costa, la concesión de 50 años a la empresa Febrer acabó en el año 2008 y que llevaban desde el año 1985 sin pagar ningún tipo de tasa ni canon municipal.

Las dos gasolineras, a pesar de que ya han recibido la notificación del juzgado, siguen operando a día de hoy aunque la regidora responsable confió que tras la reunión, que posiblemente se celebrará la semana que viene, «la empresa asuma que tiene que cesar la actividad y devolver los espacios». Costa, en este sentido, recordó que en ellos están previstos actuaciones importantes del área de mobilitat, «un aparcamiento subterráneo en el caso de la de la Plaça de Progrés y el futuro tranvía en el caso de las de les Avingudes».

Costa también confió que la amenaza de las multas, que pueden llegar al 5 por ciento del valor de la instalación, sea suficiente para convencer a los directivos de Febrer. Asi, descartó medidas más contundentes, como el desalojo por la fuerza a través de la Policía, «ya que no queremos involucrar a los trabajadores de las gasolineras. Ellos no tienen la culpa de nada», remarcó.

La regidora remarcó, asimismo, que el proceso de desmantelamiento «no tiene marcha atrás» y abogó por un calendario «pactado» con Febrer, que tiene otras 17 gasolineras repartidas por la Isla, relativo al desmantelamiento y descontaminación. Cabe recordar que, en el caso de la instalación de Progrés, se detectó que el deposito de combustible tenía filtraciones y que el suelo de alrededor se había contaminado por lo que la limpieza corresponde a la empresa.