Parada de autobús de la EMT | Pilar Pellicer

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Este jueves se celebra el pleno para la aprobación inicial de los presupuestos del Ajuntament de Palma para el año que viene. Unas cuentas que la oposición ha criticado ya que afirman que se destinará la partida del Gobierno central de la gratuidad del transporte público de este año a la rebaja de impuestos que pondrá en marcha el Consistorio a partir del año que viene y que afectan a las tasas de licencias de obras, las plusvalías y el impuesto sobre construcciones, instalaciones y obras.

La portavoz de Unidas Podemos en el Ajuntament, Lucía Muñoz, cargó duramente contra lo que ha calificado como «un atraco a la ciudadanía y los servicios públicos de Palma. El equipo de gobierno ha anunciado una bajada de impuestos que supondrá una pérdida de ingresos de cinco millones para las arcas municipales».

La regidora del grupo socialista Rosario Sánchez advirtió que «a instancias de Vox se rebajan impuestos mientras recortan en transporte y servicios públicos». A su vez, la regidora de Més per Palma, Neus Truyol, advirtió que «los recortes en transporte público afectan a los trabajadores y afectan a la igualdad de oportunidades. La rebaja de impuestos solo beneficia a las personas con alto nivel adquisitivo. Esto es política pura de Vox».

La concejala de Hisenda, Mercedes Celeste, insistió en que «no habrá recortes. Recibir la subvención de Madrid por la gratuidad del transporte público nos permitirá ajustar las cuentas. Además, Pedro Sánchez ya anunciado que seguirá la gratuidad del transporte para jóvenes y mayores de 65 años».