El Ajuntament de Pollença ha iniciado los trámites para que la casa
conocida como la Posada de Lluc, ubicada en la calle Roser Vell,
número 11, pueda convertirse en un pequeño hotel de ocho
habitaciones.
De esta manera, lo que antes fue posada de peregrinos,
adaptándose a los tiempos modernos, será ahora alojamiento
turístico. La casa tendrá que ser objeto de una importante reforma
interior, ya que la fachada ya ha sido rehabilitada.
El propietario espera poder abrir el pequeño hotel,
aproximadamente dentro de un año y medio.
El solar tiene 680 metros cuadrados y consta de planta baja y piso,
todo ello con un amplio patio interior.
El pleno aprobó también la adjudicación de las obras del nuevo
colector general que evitará los problemas de vertidos de fecales
en el Port de Pollença.
Las obras consistirán en la construcción de un nuevo pozo en
segunda línea de costa que sustituirá al actual y que recogerá
todas las aguas residuales que llegan al actual pozo de Can Franc.
De esta manera, se pretenden evitar todos los problemas que se
generan con la actual impulsión, ya que el nuevo pozo tendrá una
capacidad para atender a 4.000 habitantes.
Discusión por el Sant Crist
La propuesta del PSM de quitar el Sant Crist de la sala de plenos
provocó una irónica discusión entre los grupos municipales. Unió
Mollera apuntó que «si se quita el Sant Crist también debe quitarse
el resto de símbolos religiosos y figuras que cuelgan de las
paredes». Para el PP, también se podría colocar al Dalai Lama que
un día visitó Pollença, pero el PSOE consideró que no era español,
a lo que el PSM preguntó si Cristo lo era.
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