En la puerta de acceso al Club Náutico de s'Estanyol se produjeron algunas escenas de tensión.
Foto: ALEJANDRO SEPÚLVEDA.

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Tres antiguos socios del Club Náutico de s'Estanyol (Llucmajor) intentaron ayer en vano acceder a las instalaciones portuarias después de que el Comité Balear de Disciplina Deportiva haya resuelto a su favor el litigio que desde hace unos años mantienen con la dirección de la entidad. El pasado mes de febrero, el organismo disciplinario anuló el expediente sancionador incoado por el club por haber sido tramitado incorrectamente. El fallo del comité anuló el acto por el que Damià Verger, Coloma Ramon, Josep Buades y Maties Buades fueron expulsados del club por manifestarse públicamente en contra de la ampliación del puerto deportivo.

Ayer, Maties y Josep Buades y Coloma Ramon, acompañados de una notaria de Llucmajor, se personaron en el club con la intención de acceder al recinto, en aplicación de la decisión del Comité Balear de Disciplina Deportiva. Un empleado del club negó el acceso a los tres socios y a la notaria, quien le exigió que se identificara, sin conseguirlo.

La notaria explicó que sólo quería leer ante un directivo de la institución una resolución que obligaba a readmitir a sus clientes. A través de un teléfono móvil, los servicios jurídicos del club se pusieron en contacto con la notaria, que rehusó el diálogo al no poder tampoco acreditar su identificación los interlocutores telefónicos. Según Josep Buades, el presidente y el secretario del club observaron estos hechos desde el interior sin intervenir. Ante los impedimentos opuestos, la notaria levantó acta y se marchó.