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A.TOMÀS/M. ADROVER El alcalde de Llucmajor, Lluc Tomàs (PP), podrá realizar operaciones de tesorería como por ejemplo concertar créditos de 200 a 400 millones sin pedir permiso al pleno y mediante un simple decreto de Alcaldía. Los partidos de la oposición criticaron con dureza la medida aprobada por el PP-ASI y la calificaron de «poco ética y nada elegante».

Lluc Tomàs quiso dejar claro que la nueva ley permite estas atribuciones al alcalde. «Además el equipo de gobierno cree que se podrá agilizar el funcionamiento municipal».

Esta competencia que hasta el momento la tenía el pleno pasará ahora a ser exclusiva del alcalde. Hasta ahora, el primer edil sólo podía concertar créditos de hasta el 5% del dinero gastado por la institución el año anterior. Ahora puede llegar hasta el 30% y el Ajuntament de Llucmajor ha delegado el máximo. El portavoz socialista, Antoni Garcias, manifestó que «aunque la ley lo permita no significa que ordene hacerlo. En este caso, encontramos del todo desmesurado que el alcalde pueda concertar créditos de tantos millones». Joana Lluïsa Mascaró (PSM) y Tomàs Cantallops, de Unió Mallorquina, también la calificaron de excesiva. La nacionalista recriminó al alcalde que según los presupuestos se podría llegar a los 600 millones. El socio del PP, Joaquín Rabascó (ASI), calificó de absurdas las pegas de la oposición porque lo permite la ley.