El Ajuntament no deja que desaparezcan los antiguos lavaderos públicos

Guillem Bernat ha informado que la restauración de estas edificaciones será realizada por la brigada de cultura, lo que permitirá que en un par de años todo este patrimonio esté recuperado. De momento, el presupuesto para este proyecto es de cinco millones, aunque no será suficiente puesto que algunas de las construcciones están muy deterioradas. La restauración es lenta ya que el trabajo se realiza sobre piedra y, además, hay que arreglar todos los tejados y las acequias. Después, es preciso de dotarlas de iluminación para que puedan contemplarse por las noches también.

El proyecto de recuperar los antiguos lavaderos del municipio ha comenzado con el de Biniaraix, perteneciente a los municipios de Sóller y Fornalutx. Ambos ayuntamientos han colaborado en los trabajos de restauración y de puesta a punto. Los lavaderos públicos son porches cubiertos con teja mallorquina. Por allí, pasan las acequias con agua y, antiguamente, las mujeres se desplazaban a estos lugares para lavar.

Según testimonios escritos, estos elementos patrimoniales ya se existían en el siglo XVIII y algunos como el caso de Can Bac, aún se utiliza de vez en cuando. El municipio contaba con 11 rentadors, aunque algunos de ellos ya no existen. Pero todavía sobrevive el de Can Bac, que se encuentra, curiosamente en la calle de ses Rentadores. También queda el de Can Rave, cuya restauración está comenzando. En s'Estació, en el Mercat Municipal, en Camp de sa Mar y ses Fonts de S'olla, todavía se conservan los lavaderos, al igual que en el Port de Sóller, que ya fueron restaurados el año pasado.