La antigua costumbre de pisar la uva para obtener el mosto se ha
convertido en Binissalem en una competición original y muy vistosa.
La plaza de la iglesia acogió ayer por la tarde la segunda edición
del «Concurs de trepitjar raïm» de las Festes des Vermar.
Esta iniciativa, organizada por un grupo de jóvenes de la
revista local «Arròs amb Salseta», se ha consolidado plenamente
como puso de manifiesto ayer con el numeroso público que se reunió
para contemplar un espectáculo evocador de tiempos pasados. Los
presentes animaron con fuerza a los participantes.
Los jóvenes del pueblo, repartidos en once equipos de cuatro
integrantes, compitieron con la finalidad de pasar un buen rato y a
la vez intentar pillar alguno de los tres primeros premios dotados
con 30.000, 20.000 y 10.000 pesetas.
Las reglas del concurso eran de lo mas sencillas. Cada uno de
los equipos dispuso de diez minutos repartidos en dos tandas, para
pisar 50 kilos de uva que tenían en una gran cuba procedentes de la
viña de Can Perol.
El objetivo era conseguir el máximo posible de litros de mosto.
Eso sí, se tenía que pisar de forma tradicional, cogidos por los
brazos y dando vueltas.
Fueron muchos los participantes que concursaron con la
vestimenta tradicional que, a partir del año que viene, será
obligatoria. Después de más de una hora de esfuerzo se proclamó
vencedor el equipo formado por Mateu Capellà, Maria Antònia Martí,
Pedro Reus y Joan Toribio. Los cuatro consiguieron 16 litros de
mosto frente los poco más de once del segundo clasificado. Todos
los concursantes fueron obsequiados después con una botella de
vino.
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