El Ajuntament de Pollença abrirá en los próximos días un debate
político interno con la intención de determinar cuáles son las
deficiencias que deberá subsanar en su normativa urbanística. La
ampliación del hotel Formentor no obtiene el visto bueno de los
técnicos del Consell, que también rechazan los volúmenes de
edificabilidad previstos para Cala Sant Viçenc y la legalización
del hotel Pollença Park. El Consell exige que se elabore un estudio
de evaluación de impacto ambiental.
Antoni Marquet (PSM) estuvo presente como miembro de la
Corporación en la Comissió Insular d'Urbanisme de Mallorca (CIUM)
del pasado viernes en la se rechazó la adaptación del Plan General
de Ordenación Urbana (PGOU) al POOT propuesta por el Consistorio.
El Ajuntament deberá redactar un nuevo texto y someterlo a
exposición pública.
Marquet explica que «la ponencia técnica ha encontrado
deficiencias en la propuesta, que fue redactada por el anterior
equipo de gobierno, y de hecho algunos miembros del nuevo equipo de
gobierno creen que en parte la ponencia técnica ha sido justa en
sus valoraciones por lo que ahora se tratarán de subsanar las
deficiencias».
El PP de Pollença fue el único grupo político que votó en contra
de la adaptación del PGOU al POOT cuando se debatió en sesión
plenaria. Su portavoz, Joan Comas, señala que «el hecho de que el
Consell lo haya tumbado es una buena noticia porque tendrá que
volver a debatirse».
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