Las quejas vecinales obligan a modificar el trazado de la variante de s´Arracó

Carreteres se vio obligado a modificar el proyecto original debido a las intensas protestas de los vecinos. Éste preveía el aprovechamiento total del trazado actual ampliándose la carretera a siete metros. El trazado, al final, transcurría por la calle Tomeu Monjo hasta empalmar con la carretera PM-103 de Andratx a Sant Elm. La proximidad de la carretera al núcleo de viviendas provocó las quejas de numerosos vecinos y afectados por el tramo urbano de la carretera. Finalmente, la variante de s'Arracó transcurrirá paralela al torrente de sa Capella y se conectará con la carretera de Sant Elm a través de una rotonda.

Joan Cifre, jefe del Departament de Carreteres, explicó a este diario que la ejecución del proyecto de la carretera del Port d'Andratx a s'Arracó se tuvo que dividir en dos fases debido a las mencionadas quejas. «En estos momentos, se está terminando el acondicionamiento del camino de s'Estret y este mismo año se intentará adjudicar lo que queda del proyecto», aseguró. Las obras costarán 207'8 millones de pesetas, según consta en el proyecto que prevé un vial principal de 700 metros con calzada de 6 metros y dos arcenes de 0'5 metros.

Mientras tanto, el malestar de los vecinos del núcleo de s'Arracó y Sant Elm es mayúsculo. Las obras del camino de s'Estret se están ejecutando con extrema lentitud. De hecho, ya llevan un par de años de obra para ejecutar un corto tramo de carretera. El tráfico debe desviarse por Andratx, lo que implica recorrer varios kilómetros más, con el agravante de que algunas calles céntricas de este pueblo están en obras y dificultan todavía más el tránsito.

Como ya informó este periódico, los comerciantes de las zonas costeras están preocupados por la proximidad de la Semana Santa y el verano. Auguran una mala temporada alta si continúan las obras de las carretera.