La Conselleria d'Obres Públiques, Habitatge i Transports negociará
con el Ajuntament de Calvià y con la agrupación de taxistas el
número de licencias que necesita el término municipal. Así lo
manifestó ayer el conseller Josep Antoni Ferrer, quien indicó que
el coeficiente que determina el número de licencias a conceder en
cada municipio «no necesariamente» tiene por qué ser de 1'5 para
Calvià (este parámetro, en concreto, supone poder disponer de 270
licencias en base a una fórmula que tiene en cuenta el número de
habitantes y de plazas hoteleras).
Ferrer, que aún no ha firmado la orden que autoriza la
ampliación de licencias, insistió en que el Ajuntament de Calvià
será el último responsable en la concesión de estos permisos,
«aunque se calibrará también los intereses de los taxistas». «El
informe presentado por el Consistorio para justificar el incremento
de licencias de taxis me merece toda la confianza», aseguró el
titular d'Obres Públiques, quien subrayó el hecho de que desde 1988
no han aumentado las licencias cuando la población ha pasado de
10.000 a 40.000 habitantes, y a 100.000 en verano.
Además, se mostró partidario de regular el número de licencias
de taxi de cara a una futura mancomunidad de este servicio en el
área metropolitana de Palma. Maties Cantarero, presidente de la
agrupación de taxistas de Calvià, destacó la voluntad negociadora
del conseller para alcanzar un acuerdo y anunció una nueva reunión
para el jueves.
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