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El PSM de Binissalem, socio de gobierno del PSOE, condiciona el voto a favor del nombramiento de Miquel Nadal (PSOE) como sustituto del alcalde Salvador Cànoves al compromiso del PSOE de optar por la desclasificacición de la segunda fase del polígono. Tras el anuncio oficial de la renuncia del socialista Salvador Cànoves a la Alcaldía de la localidad, se ha iniciado un debate entre los dos partidos que forman equipo de gobierno (PSOE y PSM) para tratar de consensuar el relevo en la Alcaldía del actual segundo teniente de alcalde y regidor de Hacienda, Miquel Nadal. Antes de ratificar su confianza en el pacto de gobierno votando a favor de Nadal, el PSM quiere «cerrar una serie de discrepancias» con los socialistas. La principal divergencia puesta sobre la mesa gira entorno al desarrollo de la segunda fase del polígono.

Mientras entre las filas socialistas existe variedad de opiniones respeto a la necesidad de seguir adelante con la construcción del nuevo polígono, los nacionalistas apuestan por su desclasificación. «Todavía no hemos determinado cuál será nuestra postura en la elección, ya que antes de hacerlo queremos saber cómo quedará el tema del desarrollo del segundo polígono en la revisión de las Normas Subsidiaras», mantuvo el secretario del PSM de Binissalem, Joan Torrens, quien añadió que «aunque en principio intentaremos lograr la descalificación del segundo polígono, seguiremos negociando y si hay que ser flexibles lo seremos. Todo depende de las soluciones que se nos propongan».

El mes pasado, el PSOE acordó en asamblea parar temporalmente la ejecución de la segunda fase del polígono a través de una norma cautelar que, a modo de moratoria, paralizó durante un año la polémica construcción para pasar a debatirla en el seno de la nueva normativa urbanística, cuya aprobación inicial está prevista para noviembre. Desde el PSOE se mantienen la postura fijada en asamblea y no quieren «que la silla de la Alcaldía se convierta en la moneda de cambio para conseguir determinadas reivindicaciones».