Las obras de reforma de una parte del histórico casal de Can Gaieta
han sido paralizadas cautelarmente por un juez, después que la
vecina propietaria de la otra parte del inmueble, Isabel Gost, haya
impugnado la licencia de obras al entender que el edificio está
protegido por las Normas Subsidiarias del municipio.
El emblemático casal de Can Gaieta, que data del siglo XVII,
está dividido en dos partes que pertenecen a propietarios
diferentes. Isabel Gost posee lo que era la mayor parte del casal,
mientras que la otra parte, formada por las cuadras y parte del
jardín, pertenece a Miquel Cladera. «Cuando llevé a cabo la reforma
de la casa se me exigió que respetara todos los elementos del
inmueble porque éste estaba protegido. No obstante, ahora el vecino
que reforma la otra parte lo ha tirado todo para abajo sin respetar
nada», explica Gost.
Un informe jurídico del Ajuntament señala que, al contrario de
la propiedad de Gost, la de Cladera «es un solar y no está
protegido». Un hecho que es calificado de «incongruencia» por Gost,
que remitió este caso a la comisión Insular de Patrimonio. No
obstante, señala, Patrimonio se inhibió y «contestó que el
Ajuntament era la autoridad competente». «Me siento desprotegida
por la ley», mantiene Gost que, se dirigió al Defensor el Pueblo,
quien recientemente le ha remitido una carta en la que le comunica
que admite el trámite de su queja.
Por su parte, el regidor de Urbanismo, Rafel Munar, que también
es el arquitecto de la reforma de Cladera, señaló que «esa parte
del casal no está protegida». Además, añadió que «en el proyecto se
mantienen totalmente los volúmenes y la tipología de la fachada del
casal, que una vez finalizada la obra parecerá recuperado» .
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.