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T. OBRADOR El centro de Santanyí ya exhibe un vallado que evidencía que allí se realiza una operación de imagen. Las obras de peatonalización de la plaza Major comenzaron a ejecutarse el jueves, y la polémica se ha reavivado en el área céntrica del pueblo del Migjorn. El proyecto supone una inversión de 96 millones de pesetas y las obras son realizadas por Excavacions s'Horta. El arquitecto encargado es Antoni Vidal. Esta reforma y embellecimiento del interior urbano cuenta con muchos vecinos partidarios de la acometida, pero también muchos se oponen frontalmente.

En este sentido, los grupos de la oposición, PSM, PSOE y CMS, han coincidido en señalar que «esta obra no es prioritaria. Los conservadores actúan precipitadamente». Según el PSM, «en primer lugar se tendría que resolver el problema de la circulación y estacionamiento de vehículos». Por su parte, el ex alcalde, Cosme Adrover, define el plan de «equivocación y absurdo». Mientras, el portavoz socialista, Jesús Núñez, dice no rotundamente a esta obra al considerar que «es un capricho del alcalde que repercutirá muy negativamente a todos los ciudadanos. Esto no es una plaza, es una calle».

Algunos propietarios de negocios y bancos, como Sa Nostra, han alertado del radical cambio que supone la peatonalización y ya se plantean el traslado a otra zona. Asimismo, se documenta que bajo el asfalto, ante Es Crèdit, se halla un pozo. Cosme Aguiló, especialista en toponimia, apunta que «posiblemente fuera el pou comú de la vila, de época islámica, y debe tenerse en cuenta». El mercado se ubica ahora en la plaza de la calle Sebastiana Clar.