Las ramas de árboles caídos durante el temporal que azotó la Isla
el pasado mes de noviembre han colapsado los puntos verdes de
Pollença y el Moll. El hecho de que Pollença fuera una de las
localidades en las que cayeron más árboles debido al temporal ha
provocado que los espacios de los puntos verdes destinados al
reciclaje de masa forestal se hayan desbordado.
«Estas ramas deberían de ser retiradas cuanto antes porque ya
han sido víctimas de diversos actos de vandalismo», explica el
concejal de Medio Ambiente, Biel Cerdà, quien precisa que durante
el pasado fin de semana alguien intentó prender fuego a las ramas
depositadas en el punto verde del Moll.
La Conselleria de Medi Ambient remitió hace unas semanas una
carta a los ayuntamientos para que se pusieran en contacto con la
empresa concesionaria del servicio de eliminación de residuos
sólidos, Tirme. No obstante, señala el concejal de Medio Ambiente
de Pollença: «Aunque contactamos con Tirme para que nos ayudara a
retirar las ramas de los puntos verdes todavía no ha venido y
tenemos serios problemas para deshacernos de ésta, ya que
transportarla a una planta de reciclaje es una tarea muy costosa
para que la realice el Ajuntament a solas».
Ante este hecho, el área de Cerdà se ha puesto en contacto con
la Conselleria de Medi Ambient, que esta previsto que mañana envíe
técnicos a Pollença para tratar de buscar una solución al
problema.
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