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MIQUEL BAUÇÀ/JOSEP M. SASTRE La consellera de Medi Ambient del Govern, Margalida Rosselló, realizó ayer una «valoración muy positiva» de la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Balears (TSJB) que anula dos decisiones del Ejecutivo autonómico de 1994 y 1995 (entonces regido por el PP) que autorizaban ampliar el puerto deportivo de s'Estanyol con 343 amarres. La consellera de Els Verds recordó que una de las primeras decisiones que tomó en 1999, nada más ser elegida para el cargo, fue «ordenar abrir el Mollet», cerrado unos meses antes por orden del Govern. El pequeño varadero debía integrarse en la ampliación del puerto deportivo.

Una satisfacción mayor a la de Rosselló era palpable ayer en Josep Buades, presidente de la Asociación de Vecinos de Son Reynés de s'Estanyol, la entidad que presentó el recurso cuya resolución impide la ampliación. «Estamos muy contentos porque los magistrados han atendido nuestros argumentos, basados en que el proyecto carecía del correspondiente estudio de impacto ambiental». Buades considera que se ha producido una «buena noticia» para quienes residen o veranean en s'Estanyol porque «no se destrozará aquello que tanto quieren» y también para los usuarios del Mollet «porque se preserva un espacio público».

Otro vecino de s'Estanyol e impulsor del recurso, Baltasar Ramón, comentó que el fallo del TSJB demuestra «que vale la pena luchar» y que la sentencia «es una buena manera de preservar el entorno». El PSM, especialmente la agrupación de Llucmajor, celebró el fallo que anula la ampliación porque «da la razón a todos los colectivos y personas que durante ocho años han luchado para conseguir que s'Estanyol siga como hasta ahora».

El presidente del Club Náutico de s'Estanyol, Antoni Ginard, impulsor de la ampliación, acogió la sentencia con resignación. «Aún no sabemos si recurriremos», señaló Ginard, quien anunció que él y su junta «seguirán luchando» para intentar ampliar el puerto e incrementar el número de amarres.