La consellera de Medi Ambient ha remitido una carta al alcalde de
Artà, Montserrat Santandreu, mediante la que contesta a la moción
aprobada por el equipo de gobierno (Independents d'Artà-PSOE) y los
partidos de la oposición (UM y PP) del Ajuntament, en la que se
criticó, entre otras cosas, la lentitud de la gestión del Parc
Natural de Llevant. La carta de Rosselló también ha sido enviada al
resto de alcaldes con territorio incluido en el parque: Sant
Llorenç, Son Servera y Capdepera.
En la misiva, la consellera culpa a tres de los ayuntamientos
(no menciona Sant Llorenç) y al Consell de Mallorca de que aún no
se haya puesto en funcionamiento los organismos de gestión del
parque (órgano de gestión, el consultivo y la junta rectora) por la
lentitud de los municipios involucrados en asignar a sus
representantes. Concretamente, Rosselló explica que el órgano de
gestión no pudo ser constituido el pasado 10 de junio porque «los
ayuntamientos no habían nombrado formalmente sus representantes, a
pesar de que se había solicitado el 10 de mayo». Además, según la
consellera, los ayuntamientos no han propuesto ni los
representantes de los propietarios de fincas de menos de cien
hectáreas ni de las entidades e instituciones que figuran en el
decreto de creación del parque natural.
Rosselló explica que a pesar de estas omisiones de los
ayuntamientos se presentó el equipo de profesionales contratados y
se planteó iniciar las labores básicas para poner en marcha el
parque con el objetivo de redactar un plan de gestión para lo que
queda de año. El Ajuntament d'Artà también expresó su descontento
porque no se les había consultado a la hora de contratar el
personal que trabajará en el parque. En este sentido, Rosselló
defiende que «el proceso de contratación está regulado por la Ley
de Función Pública y gestionado por la Conselleria d'Interior».
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