El presidente de la Comissió Insular d'Urbanisme, dependiente del
Consell, Antoni Pascual, hafirmado la subrogación de la competencia
sancionadora del expediente de infracción urbanística cometida en
el cámping de la Colònia de Sant Pere, con motivo de la sustitución
de las casitas de madera que había por 90 nuevas casitas de
aproximadamente 27 m2 cada una, de tipo modular e inamovibles.
Las obras se realizaron a principios de 1999, amparándose en una
autorización de la Conselleria de Turisme, que incumplía el decreto
13/1986 de 13 de febrero, de aprobación de la nueva ordenación de
los campamentos de turismo en las Illes Balears, más conocida como
Ley ce Cámpings. El regidor de EU-EV, Julen Adrián, registró una
petición de subrogación de competencias al Consell el pasado 26 de
abril de este año, una vez comprobado que los servicios de
disciplina urbanística del Ajuntament d'Artà se habían negado
durante más de tres años a abordar esta infracción.
El cámping de la Colònia «es un hotel-urbanización enormemente
masificado, en suelo rústico, con las correspondientes redes de
agua potable, alcantarillado, electricidad y teléfono. De ninguna
manera puede ser calificada como cámping, ya que no se puede
acampar, ni tampoco introducir caravanas ni autocaravanas», afirma
Julen Adrián. Según la Ley de Cámpings sólo se puede dedicar hasta
un 8% de la superficie total del cámping en las casetas fijas,
mientras que en este se dedica el 100%.
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