No ha pasado un año desde las últimas movilizaciones de los
trabajadores del tren de Inca y vuelven a surgir las divergencias
entre la plantilla y la dirección de Serveis Ferroviaris de
Mallorca (SFM). Los trabajadores han convocado huelga total el 18
de noviembre y 19 de diciembre y paros parciales (de 8 a 10 horas y
de 20 a 22 horas) los días 21 y 27 de noviembre y 3 y 12 de
diciembre.
El malestar es considerable entre los trabajadores de la empresa
pública adscrita a la Conselleria d'Obres Públiques, Transports i
Habitatge, según expone Antoni Cifre, representante sindical de
Comisiones Obreras. La imposición de un gráfico de servicios y
turnos tras el aumento de las frecuencias del tren a Marratxí y la
convocatoria de plazas internas han desencadenado el enfrentamiento
que culminará con los paros en el servicio.
Cifre explica que los nuevos turnos se han impuesto sin llegar a
un acuerdo y, además, no se adaptan al convenio. «La empresa está
actuando con prepotencia», indica. Los trabajadores también
consideran que la convocatoria de plazas internas está fuera de
normativa. «Nos opusimos porque está hecha a la carta para
determinados cargos».
El plan de formación valorado 180.000 euros que SFM se proponía
poner en marcha también ha contado con la oposición de los
sindicatos. «Detectamos anomalías y ahora está paralizado», señala
Cifre. La plantilla no ha querido convocar la huelga el próximo
Dijous Bo, 14 de noviembre, porque «defendemos el transporte
público; no queremos perjudicar a los usuarios».
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.