La parroquia de Alaró cederá durante los próximos treinta años el
uso del antiguo salón parroquial a cambio de que el Ajuntament se
responsabilice de la rehabilitación y el mantenimiento del inmueble
durante el mismo periodo de tiempo. El edificio construido en 1953
se encuentra en estado ruinoso y antes de su cierre, hace ahora
unos veinte años, fue la última sala de cine que quedó abierta en
el municipio.
El Ajuntament d'Alaró iniciará durante los primeros meses de
2003 una reforma integral que convertira este edificio en un teatro
municipal con capacidad para unas 250 personas. Asimismo, el
alcalde de Alaró, Josep Gomila, anunció ayer que «el anteproyecto
de reforma ya está elaborado y las obras consistirán en rehacer
toda la estructura y abrir un nuevo acceso por la calle Sant Vicenç
Ferrer».
El departamento de Cultura del Consell Insular de Mallorca y el
Ajuntament d'Alaró han elaborado un convenio a través del cual el
Consell aportará el 55 por ciento del coste total de la obra, unos
329.250 euros. En este sentido, Josep Gomila comentó que «el resto
del coste de la obra será asumido por el Ajuntament, si bien se
intentarán buscar otras ayudas». El coste total de las obras de
reforma asciende a 621.000 euros.
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