«Es cierto que mi padre confió en los inicios de UM, pero si algo
quería realmente era Mallorca y sobre todo Inca y sus tradiciones».
Lina Pons, una de las hijas del ex alcalde Antoni Pons, describía
ayer con estas palabras el quehacer de su padre en el homenaje que
le rindieron cerca de trescientas personas en las casas del Virrei
en Inca. Con motivo del XX aniversario de UM, el partido que
presidió entre 1988 y 1992 quiso ayer volcarse con Antoni Pons,
rindiendo tributo más al artista, escritor y amante de la música
que al político.
El cronista oficial de la Vila y amigo personal del ex alcalde,
Biel Pieras, realizó una biografía de Antoni Pons. «Antoni Pons era
mucho Antoni Pons, estamos de enhorabuena por honrar a este
personaje tan singular de nuestra cultura, nuestras letras y
nuestra historia local y balear», dijo. Al homenaje en las casas
del Virrei acudieron ayer cerca de trescientas personas,
familiares, amigos y compañeros de partido, además del alcalde de
Inca, Pere Rotger, que también quiso rendirle tributo con su
presencia.
Durante el acto actuó la coral L'Arpa d'Inca, que siempre
disfrutó del apoyo de Pons. Los miembros de la coral le
describieron como «un impulsor de la cultura inquera». La
presidenta de UM, Maria Antònia Munar, entregó un ramo de flores a
la viuda, que también recibió una placa conmemorativa. Munar
describió a Pons como «un buen alcalde que supo tratar a todo el
mundo, pobres y ricos, independientemente de su color». La
presidenta de UM destacó el buen humor de Antoni Pons y sus glosas,
y cerró el acto diciendo que «gobernando en el Consell de Malloca
se va consiguiendo lo que él quería, una comunidad de primera».
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