Pasaban apenas diez minutos de las once de la noche, cuando el
sonido de los tambores daba fe desde el palco de la plaza de lo que
se avecinaba. Un millar de personas participó de la fiesta.
En breves segundos los dimonis, invadieron la plaza para
encender el fuego. Los niños y jóvenes fueron quienes
mayoritariamente participaron decorrefoc y es que hay que tener una
madera especial para «arder» en la plaza. Los menos atrevidos
permanecieron en los alrededores resguardados de la pirotecnia.
Ecorrefoc corrió a cargo este año de los dimonis de Albopàs y de
la colla de dimonis de Factoria So, de Santa Maria.
El espectáculo se prolongó durante media hora. Un gran trueno
puso fin acorrefoc con una lluvia de fuegos artificiales.
La fiesta estuvo acompañada de espectaculares medidas de
seguridad y concluyó sin incidentes, según informó la Policía
Local.
Durante ecorrefoc se cerró el acceso rodado de vehículos a la
plaza y los escaparates de los bares y comercios se reforzaron con
cartones y papeles. Asimismo, se recomendó a los asistentes ir bien
protegidos y con ropa de algodón.
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