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A.BASSA.
Más de 700 personas de diferentes lugares de Mallorca degustaron ayer cerca de 11.000 calçots en la ya tradicionacalçotada que se celebra anualmente en el patio de la Escola Nova de Porreres. El tiempo acompañó y se pudieron asar los calçots y las botifarras catalanas sin ningún problema. Este acto se convierte cada vez en una fiesta, en una comida de compañerismo en el que se saborean manjares catalanes.

La jornada empezó con la actuación de Els castellers de Mallorca y els Al·lots de Llevant que coincidía con el inicio de su temporada. Las dos colles ofrecieron buen espectáculo. La calçotada está organizada por siete entidades de Porreres. «Hemos preparado una docena de calçots para cada persona. Los vamos asando y los envolvemos en un papel de periódico para que estén calientes. Luego damos la salsa romesco una botifarra, pan, vino y postre», comentó Vicens Marí, uno de los coordinadores. Todos los calçots provienen de Porreres y se encargan en agosto.

Al acto asistieron el alcalde, Joan Sastre (UM) y los concejales municipales. Invitados por el candidato a la Alcaldía por el PSOE, Jaume Sorrell, se desplazaron el president del Govern, Francesc Antich, Celestí Alomar, Francina Armengol y Pere Fullana. «No conocía la fiesta y me apetecía venir, también para dar un poco de apoyo al candidato», dijo Antich.