Una vez acabada la reforma integral del castillo de Alaró, que está
previsto que finalice en el año 2005, las instalaciones podrán
ampliar su actual oferta hasta 48 plazas. De momento, los dos
edificios dedicados a hospedería tienen una capacidad para alojar
unas 40 personas.
Fodesma, organismo dependiente del Consell de Mallorca, ya ha
elaborado el proyecto de reforma que afectará al edificio principal
y está previsto que las obras comiencen una vez haya finalizado la
rehabilitación de s'Obra Nova y sa Taverneta, que se realiza en una
primera fase y que se terminará probablemente por Pascua.
De esta manera, las instalaciones no dejarán de funcionar en
ningún momento y darán servicio a los visitantes. Según explicó el
alcalde de Alaró, Josep Gomila, la nueva actuación en el edificio
principal mejorará la redistribución del espacio y se recuperarán
algunos elementos deteriorados.
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