Reunión entre el sindicato UGT y los comités de empresa.

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Un año después de que el grupo inversor Line Invest XXI, liderado por Rafael Español, comprara Majórica, la firma perlera sigue en suspensión de pagos, no se ha llevado a cabo ninguna ampliación de capital, la empresa podría venderse a un grupo asiático y entre 250 y 300 trabajadores podrían quedarse sin empleo. Este es el panorama que denunció ayer en rueda de prensa, el delegado comarcal de UGT, Guillem Vadell, y los representantes de los comités de joyas y fábrica. La crisis, la alarma social y la preocupación entre los trabajadores vuelve a estar en el orden del día.

«Los nuevos propietarios nos aseguraron que invertirían mil millones de pesetas en cuatro años y todavía no se ha realizado una ampliación de capital. Han retrasado la suspensión de pagos y se están negociando expedientes de suspensión temporal de contratos que podrían afectar entre 80 y 90 personas», comentó Vadell. Pero lo más grave, según Vadell, es que «los propietarios han admitido que tienen contactos con un grupo de empresas asiáticas por vender Majórica. No sólo se pretende vender acciones sino que se podría vender la empresa al 100 por cien».

La preocupación entre los trabajadores se puso de manifiesto una vez más. Vadell comentó: «Hemos trasladado a Rafael Español una carta para que asuma una serie de compromisos. Le hemos explicado que no negociaremos ni un expediente de regulación, ni planes de viabilidad si no se cumplen dos requisitos, para nosotros muy importantes: que la producción se quede en Manacor y que como mínimo se respete el 80 por ciento de la plantilla».