TW
0

T. OBRADOR
El futuro del velódromo de Campos, popularmente llamado sa pista o sa voltadora, es incierto. La causa es la prolongación de la ronda de s'Estació que el Ajuntament está llevando a cabo y que transcurre por detrás de la empresa de quesos Piris hasta el mismo velódromo, ante la gasolinera de la salida del pueblo. Actualmente, se están ejecutando las obras que ya han provocado la eliminación del aparcamiento que disponía la citada instalación deportiva, patrimonio de Mallorca que vivió sus mejores años estando en activo el campeón felanitxer Guillem Timoner. La desaparición del aparcamiento en cuestión ha provocado que la propietaria de la pista, Catalina Oliver, haya denunciado el Ajuntament de Campos.

Miquel Llinàs, representante de la titular, afirmó: «Se perjudica mucho a las instalaciones. El trazado de la ronda proyectada por el PP hubiera podido ser otro. Éste no es de sentido común». El aparcamiento tenía capacidad para más de 50 vehículos. Por otra parte, Llinàs informó que la Justicia tendrá que valorar si la cantidad pagada por la expropiación «forzosa» es legal. En su opinión, la valoración económica «es insuficiente», y «no ha habido nunca voluntad por parte del Ajuntament». En este sentido, en los últimos años ha habido reuniones entre la propiedad y la institución local con el objetivo de que la voltadora pasase de manos privadas al pueblo.

Llinàs detalló que en la última negociación antes de las elecciones con el equipo de gobierno del PP dirigido por Andreu Prohens, el Ajuntament les ofreció a cambio un solar de la zona posterior de sa Ràpita «que no estaba en condiciones». Ahora, según Llinàs, «la propiedad está en desventaja», si bien reconoció que «sa pista un día tendría que ser del pueblo». El complejo estás infrautilizado.