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El Ajuntament de Banyalbufar procedió ayer al derribo del cerramiento de hormigón del punto de reciclaje del municipio, ubicado a la entrada del la localidad. El punto de reciclaje con contenedores de vidrio, papel y plástico está situado al lado de la carretera y el cerramiento de hormigón fue construido sin el preceptivo permiso del Departament de Carreteres del Consell de Mallorca, según explicó ayer el alcalde Mateu Ferrà (UM).

Ferrà indicó que, además de ser una construcción ilegal, suponía un peligro para los ciudadanos puesto que estaba construido en una curva y abarcaba una superficie de unos 20 metros cuadrados. «Los camiones que venían a recoger el material no tenían espacio para maniobrar y era peligrosísimo», argumentó el alcalde.

El Consistorio instalará otro tipo de cerramiento de madera y más integrado en el entorno. Además, el acceso al punto de reciclaje será más fácil tanto para los camiones de recogida de los residuos como para los vehículos de vecinos del municipio.