MARÍA VÀZQUEZ08/04/04 0:00
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La Guardia Civil y Policía Local de Sóller investiga la posible celebración de rituales satánicos y prácticas de budús en una zona de la localidad conocida como el Bosc Gran de s'Arrom. La aparición hace unas semanas de una oveja muerta en las inmediaciones del Port de Sóller a la que se le habían extraído los intestinos y esparcido por la zona alertó a la Guardia Civil y Policía Local del municipio. La policía también tiene conocimiento de la aparición de algunas cabras con la cabeza seccionada en las inmediaciones de la ciudad.

Para la ceremonia, según testigos que no han querido dar a conocer su nombre, se realizó un círculo con piedras y se encendió un fuego. También se colocó una escalera de cuerda que bajaba de un árbol y, según las mismas fuentes, se emplearon cintas de casettes con voces muy infantiles o de personas muy jóvenes. La Guardia Civil intervino un radiocassette en la zona. En este ambiente se piensa que se invocó al demonio y los jóvenes bailaron. Los reunidos eran menores o al menos muy jóvenes.

Pero los hechos más comentados y que en estos momentos investiga Guardia Civil, fueron los ocurridos hace escasamente dos semanas en el bosque conocido por el Bosc Gran de s'Arrom, donde al parecer tuvo lugar un ritual satánico en que podrían haber participado algunos menores.

Uno de ellos aseguraba que era Jesucristo.
No es la primera vez que en Sóller ocurren acontecimientos de esta índole. Hace unos años en la zona de ses Tres Creus también ocurrieron hechos extraños que hoy todavía no se han resuelto y que culminaron con el asesinato de un ciudadano de Sóller. Hoy por hoy, la zona de ses Tres Creus, vuelve a ser de nuevo frecuentada a altas horas de la noche y también se sospecha que es escenario de extraños rituales. Hay vecinos de la ciudad que sospechan que en algunos lugares de la ciudad se practican rituales de budú o brujería muy frecuentes en países como Cuba, Colombia o Costa Rica.

En Mallorca existen muchas zonas que conservan una leyenda de reuniones de brujería. Así las «rondallas mallorquinas» citan lugares como es Puig de s'Aucadena, en Alaró; Son Forteza, de Puigpunyent; el Pla de Sant Jordi, en Palma, o Son Cardaix, en Artà.