Margarita Palmer13/04/04 0:00
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La plaza de la Constitución cambiará en breve de fisonomía. El Ajuntament ha acordado llevar adelante la petición realizada por el consejo parroquial de demoler la capilla situada en el centro de la plaza. La capilla, que no cuenta con ningún tipo de catalogación especial, fue construida en 1950 para albergar al Sant Crist de sa Capelleta, imagen de Jesucristo crucificado muy querida en Esporles y patrono del gremio textil de la villa cuando ésta contaba con una industria importante en este ramo. La capilla, en la actualidad, presenta un estado de conservación muy deteriorado, restando atractivo y también espacio a la plaza debido a su ubicación. El Ajuntament ya ha destinado una partida de 12.000 euros al proyecto de remodelación de la zona de la capilla que será sustituida por unos bancos de piedra con una zona ajardinada y un ciprés en el centro.

En cuanto a la imagen de Jesucristo crucificado y demás enseres de culto religioso, su nuevo emplazamiento, según el alcalde Jaume Pou, será la capilla del cementerio, capilla que actualmente se encuentra bastante desprovista de imágenes religiosas. La noticia de la inminente demolición de la capilla ha sentado como un jarro de agua fría a muchos devotos del Sant Crist de sa Capelleta, como se conoce popularmente a Jesucristo crucificado, a quien acuden a pedir gracias y agradecer favores recibidos.

El rector Antoni Mercat ha declarado a Ultima Hora que la propuesta de demoler la capilla surgió del pueblo al entender que la ubicación de la capilla, en la plaza de la Constitución, no era la más idónea dadas las actividades de carácter lúdico que se celebran en este espacio incompatibles con el sentido religioso y de devoción que le corresponde a un lugar santo. El rector aseguró, además, no tener constancia del malestar de los devotos y dijo que hasta la fecha no ha recibido ninguna queja. Finalmente, el rector indicó que la ubicación del Sant Crist está aun por concretar. Junto a la propuesta del Ajuntament, también se baraja la posibilidad de buscar un hueco en una de las capillas de la iglesia parroquial de Sant Pere.