En el término municipal de Capdepera se ofrecen viviendas que no cumplen con la normativa urbanística.

TW
0

Comprar una casa en suelo rústico en el término municipal de Capdepera hoy en día se ha convertido en una empresa altamente «peligrosa». El Ajuntament de la localidad ha detectado un número muy significativo de construcciones, con un expediente de infracción urbanística en curso, que están a la venta, ya sea a través de Internet o bien a través de agencias inmobiliarias. Así se ha confirmado desde el área de Urbanismo del Ajuntament de Capdepera, que ha lanzado la voz de alarma advirtiendo a los particulares del peligro que supone, a la vez que aconseja a futuros compradores de una vivienda en rústico que consulten su situación legal antes de formalizar cualquier contrato de compraventa.

«A raíz de la denuncia de una serie de vecinos que se han dirigido al Ajuntament solicitando información, hemos podido comprobar que muchas de las edificaciones que se venden por Internet están inmersas en un procedimiento disciplinario que puede acabar con una importante multa que llegue hasta el 100% del coste de las obras objeto de infracción o incluso con la demolición de la construcción». Así lo explicó el concejal de Urbanismo del Ajuntament de Capdepera, Antoni Muntaner (Es Grup), que añadió que «lo denunciamos para evitar que se engañe a los particulares. Resulta que se puede estar adquiriendo una casa ilegal y ello puede desembocar en situaciones muy desagradables». Los posibles compradores se encuentran en una situación de indefensión total, pues al adquirir una vivienda nadie piensa que no cumple con la normativa.

Por todo ello, desde el Ajuntament se insta a quienes pretendan adquirir o alquilar una edificación en el término municipal de Capdepera, sobre todo en rústico, a «acudir al Ajuntament con el objeto de averiguar los posibles problemas que pueda tener la edificación en concreto». Muntaner asegura que se dará a los particulares toda clase de facilidades para acceder a esta información. «Queremos evitar a los vecinos la sorpresa de encontrarse que han comprado una casa que tal vez se haya de derribar». El edil de Urbanismo aunque no preciso el número de casas afectadas si reconoció que «es significativo». Se ofrecen casas con precios que pueden llegar hasta los 240.000 euros.