TW
0

Luis Marín, ex presidente de la patronal Fetur, y su hija Rosa, acudieron ayer a los juzgados de Palma para ratificar la denuncia contra la ex alcaldesa de Calvià, Margarita Nájera, por el supuesto delito de obstrucción a la Justicia. Esa infracción penal, según los denunciantes, se produjo cuando un policía municipal y un funcionario del Consistorio que entonces presidía Nájera realizaron visitas a diversos comerciantes con el objetivo de conminarles a que retiraran una denuncia por el «caso Western Park». Como se sabe, esa causa, abierta también en los juzgados, investiga la polémica concesión de licencia para ampliar ese parque acuático de sa Porrassa.

La denuncia fue interpuesta por el fiscal jefe de Balears a instancias del PP en octubre de 2002 por un posible delito contra la ordenación del territorio recogido en el artículo 320 del Código Penal. En relación a esa causa, ya han declarado Margarita Nájera y su hermana, Isabel, arquitecta que realizó el proyecto. El Colegio de Arquitectos, en su día, no otorgó el visado a ese proyecto.

Pero, el juez que investiga el «caso Western Park», decidió abrir una pieza separada en el mismo pleito para investigar, primero, un supuesto delito de coacciones del Consistorio que presidía Nájera, que ayer, oficialmente, se alteró por el de una posible obstrucción a la Justicia, según confirmó a Ultima Hora el abogado de la acusación, Ramón Montero.

El letrado explicó que en la vista celebrada ayer, en la que estuvieron presentes el fiscal anticorrupción, Joan Carrau, encargado de todas las causas en las que está inmersa la ex alcaldesa, y el abogado de Nájera, Gabriel Garcías, «presentamos diversas pruebas que confirman la acusación».

Entre esa documentación destacan diversas grabaciones realizadas en el momento en que los comerciantes, supuestamente, eran presionados o coaccionados para que retiraran la denuncia contra Nájera, así como un informe aportado por una agencia de detectives. El letrado García, por su parte, dijo que no había quedado constancia física de esas supuestas pruebas, aunque sí el anuncio de que las iban a incorporar al sumario.