Una vecina de Porreres ha presentado un recurso contencioso
administrativo contra un decreto de Alcaldía que ordenó la
demolición de su casa prefabricada ubicada en suelo rústico en el
camino de sa Pedrera. El Ajuntament de Porreres ordenó la retirada
de esta vivienda porque no cumple con la tipología estipulada en
las normas subsidiarias. Las casas prefabricadas son de tipología
nórdica y el planeamiento urbanístico impide su construcción aunque
no de forma específica para este tipo de viviendas que han
proliferado en los últimos años.
Además, la casa fue construida sin la preceptiva licencia de
obras y en un solar que no tiene los metros cuadrados suficientes
para albergar una vivienda en suelo rústico. Ahora, la titular
solicita la suspensión del decreto del alcalde en base a que, según
consta en el contencioso, «la edificación que se pretende demoler
es su única vivienda tanto para ella como para su pareja». La
propietaria de la casa entiende que «hay razones suficientes tanto
formales como de fondo como para que sea factible la anulación de
la resolución».
El alcalde de Porreres, Joan Sastre (UM), se mostró tranquilo
ante este recurso porque «esperamos que los juzgados nos den la
razón. Ellos saben que tendrán que retirar la vivienda porque las
normas subsidiarias son claras y no permiten la colocación de casas
con esta tipología, ellos lo sabían». El alcalde añadió que «además
no tienen el terreno necesario. Nosotros les avisamos en repetidas
ocasiones de que no la construyeran pero no nos hicieron caso».
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