Blanca Iglesias era asesora del alcalde, cargo de confianza suyo, y coordinadora municipal.

Blanca Iglesias era asesora del alcalde, cargo de confianza suyo, y coordinadora municipal.

LUIS PLANAS03/05/05 0:00
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El Colegio Oficial de Psicólogos de las Illes Balears (COPIB) ha pedido al Ajuntament d'Inca que se persone en la causa contra la ex trabajadora municipal, Blanca Iglesias, por la presunta falsificación de un título universitario en Psicología por la Universitat de Barcelona. La junta de gobierno del colegio ya decidió personarse como acusación particular. En su último boletín informativo, los colegiados en Psicología de Balears explican que «entendemos que el Ajuntament, como entidad pública, ha de mostrar por encima de todo su interés en que no quede afectada la confianza del ciudadano en las instituciones públicas y, en este sentido, se insiste en el hecho de que Blanca Iglesias «era asesora directa del alcalde y nombrada por él como cargo de confianza». «Nos llamaría la atención que finalmente el Colegio se quedase sólo en esta acusación», añaden.

Cabe recordar que una vez que la Universitat de Barcelona confirmó la presunta falsificación de la titulación presentada por Iglesias y después de que ella presentase la dimisión, el propio alcalde Pere Rotger y el secretario municipal pusieron los hechos en conocimiento de los juzgados de Inca, pero entonces el alcalde ya dejó claro que no tenía ninguna intención de denunciar a su ex asesora ni que el Ajuntament se personase en el procedimiento judicial.

Sobre estos hechos, el Colegio Oficial de Psicólogos de Balears explica que «ha ofrecido su colaboración y ha solicitado al alcalde del Ajuntament d'Inca toda la información relevante sobre esta causa», pero que «la respuesta institucional nos remite al juzgado donde se llevan las actuaciones pertinentes». Los psicólogos colegiados consideran que tienen la «obligación de defender la profesión y atender a los ciudadanos que confían cada día en el trabajo de los psicólogos acreditados», por lo que también consideran que la psicóloga a la que presuntamente «copiaron» su titulación, «es prácticamente la primera perjudicada, y entendemos que también debería mostrar su indignación y rechazo y acudir a los tribunales para denunciar el caso».