La dirección del PSIB avaló la moción de censura de Muro y el propio Alfredo Pérez Rubalcaba, ministro de Interior, aplaudió cuando Francesc Antich aludió ayer a este asunto en una comida mitin celebrada en una barbacoa de Palma. Antich, en su intervención, recogió el guante que le lanzó Jaume Matas, que le pidió que no pactará «con tránsfugas», en alusión al edil que ha dejado el PSM y ha pasado al Grupo Mixto en disconformidad con la línea de su partido.
«Que ponga día, que yo ya le ofrezco dos lugares para reunirnos, o Maria de la Salut o Calvià, dos municipios donde los cambios de grupo han favorecido a intereses del PP», afirmó Antich. Los socialistas no consideran que el edil del PSM sea un tránsfuga. Ni Armengol ni el previsible nuevo alcalde, si prospera la moción, el socialista Pere Amengual.
Francina Armengol, secretaria general de la Federación Socialista de Mallorca (FSM), señaló que «pronto» se hará «justicia» respecto a «lo que votaron los ciudadanos de Muro» en las pasadas elecciones municipales, en las que «dieron la mayoría a las fuerzas progresistas y de izquierdas» en este Ajuntament. Sin embargo, esta alianza «por unas cuestiones muchas veces internas de uno de los partidos que tenían que conformar este pacto se ha tenido que retrasar hasta este momento».
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