Orell está convencido de que la Cooperativa necesita un cambio en su presidencia y en la manera de funcionar de la entidad que «debería de ser mucho más democrática y participativa». Uno de los puntos principales en los que basa su campaña es «luchar más y mejor para encontrar nuevos puntos de venta y conseguir que el payés del valle pueda vender mejor su producto, aprovechando el renombre que todavía tiene Sóller y muy especialmente sus cítricos y su aceite».
Para Jaume Orell, «está muy claro que la administración competente, con iniciativas como las impulsadas para el aceite, ha entendido que la comercialización se debe mejorar a través de la calidad, no de la cantidad». Sin abandonar una política como la de la denominación de origen, Orell cree que es posible conseguir que los payeses de Sóller y Fornalutx puedan obtener su propio aceite (el de su propio olivar), un aspecto que es muy solicitado por el colectivo: «Existen fórmulas para conseguirlo aunque esto puede implicar aumentar la maquinaria actualmente existente». El candidato lamenta que algunas iniciativas para la naranja del valle no hayan llegado a buen puerto por falta de apoyo desde la misma entidad aunque también admite que este «no ha sido el único problema».
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