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Las obras de asfaltado y pintado que el Govern efectúa en la autovía Palmanova-Peguera provocaron ayer importantes retenciones desde primera hora de la mañana. Según informó la Conselleria d'Obres Públiques esta restricción del tráfico «es necesaria para llevar a cabo estos trabajos con seguridad, cuya duración será de unos quince días».

Ante la grave situación acudieron efectivos de la Guardia Civil para intentar minimizar la situación. Los agentes también se vieron afectados por las colas al averiarse una de sus motos, teniendo que esperar más de dos horas a la llegada de asistencia técnica.

Los trabajos causaron largas colas que ya a las 8'30 horas llegaban desde el punto de las obras en Palmanova hasta Palma, concretamente a la altura del desvío de Génova. Además de crear numerosas molestias a los usuarios de la vía como es el caso de unos turistas que perdieron su vuelo, o los padres de que no llegaron a tiempo de recoger a sus hijos en al colegio y en algunos casos contaron con la ayuda de la Policía Local que se encargó de que fueran llevados hasta sus casas, o coches averiados que tuvieron que esperar numerosas horas a la grúa o los distribuidores de mercancías que no pudieron cumplir sus horarios, entre otras muchas historias personales que le sucedieron en el largo día de ayer a los usuarios de la autovía.

Por otra parte, el PSOE de Calvià exigió ayer al Ajuntament y al Govern balear que ejecuten las obras en horarios con menos tráfico. Califican la actuación a esas horas de un lunes de «irresponsabilidad imperdonable por parte del alcalde de Calvià, Carlos Delgado, y la responsable del Govern d'Obres Públiques, Mabel Cabrer». Señala que es «de sentido común» no ejecutar unas obras en los momentos de más tráfico y señala que lo normal es realizarlas en fines de semana, festivos u horas nocturnas.