08/02/07 0:00
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MARTA MEDRANO
El PSM de sa Pobla anunció ayer su voluntad de interponer de «forma inmediata» todas las acciones penales pertinentes contra todos los miembros de la junta de gobierno que voten a favor de la propuesta del alcalde, Antoni Serra (PP), para adjudicar «a dedo» el proyecto del futuro cuartel de la Guardia Civil a un joven arquitecto pobler. La decisión se produjo tras una reunión entre el alcalde y toda oposición para pactar temas pendientes antes de las elecciones. Aunque el resto de formaciones políticas (PSIB-PSOE, Independents per sa Pobla y UM) vieron con buenos ojos el procedimiento al querer «dejarlo atado» antes de las elecciones, ahora el PSM califica la acción de «prevaricación y delito».

«Este encargo puede superar los 250.000 euros de honorarios. Hace 40 años que esperamos un nuevo cuartel y ahora no podemos esperar dos meses para tramitar el procedimiento y dar oportunidades a todos los arquitectos», argumentó el portavoz del PSM, Joan Fiol, que aseguró que existen vínculos profesionales entre el arquitecto en cuestión y el hermano del concejal de Urbanisme, Joan Palou. La actitud de Fiol fue reprochada ayer por todos los partidos, especialmente desde la oposición. Tanto el portavoz del PSOE, Lluís Socies, como el portavoz de Independents per sa Pobla, Joan Comes, califican esta amenaza como «un ataque de celos injustificado». «Nosotros somos los primeros que criticamos al PP por conceder obras a dedo pero en este caso está más que justificado porque sacar el proyecto a concurso supone tardar medio año más y retrasar un proyecto que depende de varias administraciones», argumentó Comes.

El alcalde quedó atónito tras conocer la amenaza del PSM. «La intención es dar una oportunidad a una persona y dejar atado el convenio marco para el futuro cuartel entre todas las fuerzas políticas. No entiendo la actitud de Fiol», lamentó.