Cabrer, Delgado y Porsell descubren el monolito que conmemora la inauguración de la autovía. Foto: P.BOTA

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P.A.M.
La consellera d'Obres Públiques, Habitatge i Transports del Govern balear, Mabel Cabrer, acompañada por los alcaldes de Calvià y Andratx, Carlos Delgado (PP) y Jaume Porsell (PP), inauguró ayer los nueve kilómetros de autovía correspondientes al desdoblamiento de la carretera ya existente y a la prolongación de la Ma-1 entre Palmanova y Peguera.

La nueva autovía soportará un tráfico diario de aproximadamente 30.000 coches y evitará las largas colas e incómodos embotellamientos que hasta ahora se registraban a la altura de Palmanova.

Asimismo, el proyecto ha posibilitado la prolongación del paseo de Calvià desde el enlace de Cala Figuera hasta Peguera. Para dar continuidad al nuevo paseo con el ya existente se han instalado dos pasarelas para peatones sobre la rotonda de Cala Figuera.

La consellera Cabrer efectuó ayer un recorrido a través de la nueva infraestructura que se inicia con una rotonda en la carretera de es Capdellà, que conecta la nueva ronda de Peguera con el enlace de Peguera-La Romana. En este punto se inicia el tronco de la autovía y también es el punto de partida del paseo de Calvià y de la carretera de servicio que da acceso a las fincas afectadas por la prolongación de la autovía. Según la consellera, un punto muy importante del nuevo vial ha sido la ejecución de un falso túnel al paso del Coll de Gorvió. Este túnel, de 195 metros de longitud, ha permitido unir dos zonas protegidas ANEI que con el antiguo trazado de la carretera habían quedado separadas.

La nueva autovía cuenta con cuatro enlaces a distinto nivel en Cala Figuera, Santa Ponça, Costa de la Calma y Peguera-La Romana que permiten los movimientos necesarios de circulación.