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El Estado no solo no aumenta la aportación anual que destina a los consells insulars para la ejecución de obras de infraestructuras en los municipios, sino que la reduce. Este año, el Ministerio para las Administraciones Públicas (MAP) ha decidido recortar en 5.000 euros la partida destinada al Consell de Mallorca, una cantidad que no es espectacular pero que viene a menguar una inversión ya considerada como «ridícula».

En total, el organismo insular ha recibido este ejercicio 2.390.000 euros del Gobierno central, de los que 640.000 euros se han destinado a subvencionar dos proyectos de carreteras y el resto -1,7 millones- para sufragar obras de infraestructura del Pla d'Obres i Serveis (POS). Domingo Bonnin, director insular de Cooperació Local, explica que en todo el tiempo que lleva en el departamento -casi cuatro años- esta aportación del Estado apenas se ha modificado. «2,3 millones de euros es una cantidad ridícula para realizar obras de infraestructura en 53 municipios de la Isla», asegura. «Este es el presupuesto de algunas de las actuaciones que realizamos en un sólo municipio». La aportación, en efecto, es ínfima si se tiene en cuenta que el volumen del inversiones del POS es de 16,6 millones en toda Mallorca.

Explica Bonnin que los proyectos que presentan los municipios cada vez son de mayor envergadura y con un presupuesto más alto «y las aportaciones económicas de Madrid son históricamente las mismas». El director insular de Cooperació Local recuerda que se solicitó al Ministerio para las Administraciones Públicas incrementar el presupuesto de Mallorca para subvencionar ecovías, pero no se consiguió.