La excavadora, procediendo por orden judicial al derribo de la construcción. Foto: LL.G.

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LL.GARCIA
Una sentencia sin precedentes que obliga la promotora de Cala Tuent a la demolición de «parte» de una piscina, propiedad de un súbdito inglés porque invadía en parte la zona de protección de un vial inacabado y desclasificado, fue ejecutada ayer a pesar de los intentos del propietario por evitar hasta el último momento el derribo.

La promotora de Cala Tuent - urbanización desclasificada por el Consell a través del Pla Territorial de Mallorca - , tiene que asumir totalmente esta sentencia judicial aunque en realidad, aparentemente, es la «perjudicada». De hecho, la denuncia la interpuso un vecino, súbdito alemán, que también tiene diversas propiedades en la zona, sin embargo, que no era directamente afectado por la obra. Curiosamente este vecino es el propietario de una piscina, también en Tuent, sancionado por Costas por estar construída dentro de una zona de protección, que tiene una orden de demolición todavía pendiente. Esta piscina también tiene una licencia municipal.

La piscina se empezó a derribar ayer por la mañana después de que el juez de Paz de Escorca entregara al propietario de la finca de Capapuig, una de las más antiguas del lugar, el orden judicial. Inmediatamente, en presencia de la Policía Local y de la Guardia Civil, un arquitecto y un aparejador marcaron la «parte de la piscina» a eliminar, mientras el propietario, el señor Mcadie, asistía a los hechos, resignado, y hablaba con sus abogados por teléfono. También estaban los representantes de la urbanización.