TW
0

JOAN SAMPOL
Después de la mayoría absoluta conseguida por el PSOE en las pasadas elecciones municipales del 2003 que sorprendió hasta a los mismos socialistas y que convirtió a su cabeza de lista, Miquel Nadal, en el alcalde del municipio, parece que en las próximas elecciones del 27 de mayo sería un fracaso el no conseguir los siete concejales necesarios para la mayoría absoluta.

Los demás partidos tendrán el objetivo de evitar precisamente esto, y conseguir que Nadal tenga que pactar con algún otro partido para volver a ser el alcalde de Binissalem.

El Partido Popular, principal partido de la oposición con cuatro concejales, con Jeroni Salom al frente repitiendo candidatura, intentará arañar los votos necesarios para conseguir un edil más y poner las cosas más difíciles a los socialistas. Para ello, Salom apuesta por una política de calle, escuchando a la gente y prometiendo trabajo e ilusión.

Una de las novedades es el candidato del PSM, Bartomeu Abrines, que sustituye a Antonina Ferrà al frente de los nacionalistas. Abrines ya fue concejal en los comicios del 1999 y actualmente es secretario general de la agrupación PSM-Binissalem. Tendrá el reto de seguir con el gran trabajo que ha realizado Ferrà estos cuatro años e intentar recuperar el concejal perdido en el 2003 para ser uno de los partidos que tenga la llave electoral en caso de que el PSOE no consiga la mayoría absoluta.

La otra novedad es la reciente coalición formada por ERC e Independents de Binissalem, que presentan al republicano Josep Martí como alcaldable. Martí quiere fomentar la participación de los ciudadanos y defiende una manera de hacer política plenamente democrática.