El Ajuntament de Porreres intensificará el control de empadronamiento de inmigrantes mediante la solicitud de más documentación a las personas que soliciten su inscripción en el padrón municipal.
Ante esta situación, los servicios administrativos municipales solicitarán documentos que avalen que la persona que pide empadronarse, tiene la intención de residir en la localidad. Bauçà explicó que se solicitará un contrato de alquiler refrendado ante notario y una autorización escrita del propietario que arrienda la vivienda, donde se especifique cuántas personas vivirán en la casa.
El motivo que ha provocado esta medida del recién constituido equipo de gobierno de Unió Mallorquina, ha sido que se ha detectado que muchos inmigrantes se han empadronado en la localidad en los últimos años al tener más facilidades que en los municipios donde realmente residen. «Al parecer, en otros pueblos exigen más papeles y vienen a empadronarse a Porreres, pero hemos detectado que realmente no viven aquí», explicó el alcalde Bernat Bauçà.
Esto permitirá que el Ajuntament pueda tener un mayor control sobre la población inmigrante empadronada y la que realmente reside en el municipio.
Esta medida ha sido unas de las primeras decisiones de este mandato y ha surgido a raíz de diferentes reuniones entre Bernat Bauçà y la regidora de Bienestar Social, Francisca Mora, tras reunirse con el personal de la Policía Local y de Servicios Sociales. Se decidió que este departamento redactará un informe sobre la situación del empadronamiento de inmigrantes que residen en casas con régimen de alquiler. «La tarea no será fácil y la iremos haciendo poco a poco. Se mirará cuántas personas están empadronadas en una casa y cuántas viven allí», apuntó el alcalde.
Las medidas beneficiarán a los arrendatarios puesto que en muchas ocasiones viven en una casa más personas que las que realmente la alquilaron.
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